che cos'è la cistite emorragica | Dimann
Bienestar

¿Qué es la cistitis hemorrágica? Todo lo que necesitas saber

Mi querido amigo,

Por desgracia, hay distintos tipos de cistitis, y conocerlos es el primer paso para tratarla eficazmente.

Hoy, en concreto, ¡nos centramos en la hemorrágica!

Feliz lectura. ❤️

Cistitis hemorrágica: qué es, qué la causa y cómo tratarla eficazmente

¿Qué es la cistitis hemorrágica?

La cistitis hemorrágica es una lesión del revestimiento interno de la vejiga y de los vasos sanguíneos que irrigan su interior.

Hemorrágico significa sangrado. Cistitis significa inflamación de la vejiga.

Por tanto, una persona que padezca cistitis hemorrágica sufrirá los síntomas típicos de la inflamación de la vejiga y notará la presencia de sangre en la orina.

Debes saber que existen cuatro tipos, o grados, según la cantidad de sangre en la orina:

  • Grado I: hemorragia microscópica (no visible);
  • Grado II: hay hemorragia visible;
  • Grado III: hemorragia con pequeños coágulos;
  • Grado IV: es una hemorragia con coágulos lo suficientemente grandes como para bloquear el flujo de orina.

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Posibles causas de la cistitis hemorrágica

Hemos mencionado antes que la cistitis hemorrágica se define por síntomas del tracto urinario inferior que incluyen hematuria e irritación durante la micción. Es el resultado del daño al epitelio de transición de la vejiga y a los vasos sanguíneos causado por:

  • toxinas;
  • patógenos;
  • radiación;
  • medicamentos;
  • enfermedades.

Pero vayamos por orden.

En general, las causas infecciosas de la cistitis hemorrágica incluyen bacterias y virus.

En cambio, en el caso de la cistitis hemorrágica no infecciosa, las causas suelen deberse a la radiación pélvica y a la quimioterapia.

Como ya hemos dicho, hay distintos grados de cistitis hemorrágica, que puede ser microscópica asintomática o con hematuria macroscópica y coágulos, que provocan retención urinaria.

En consecuencia, el tratamiento depende de la gravedad de la hemorragia y de los síntomas.

Las infecciones también pueden causar cistitis hemorrágica, pero estas causas son menos graves, no duran mucho y son más fáciles de tratar.

Cistitis hemorrágica: tratamiento y prevención

El tratamiento precoz de la cistitis hemorrágica es importante por dos razones principales:

  1. reducir el dolor;
  2. prevenir daños a largo plazo en la vejiga.

Como hemos dicho, las opciones de tratamiento varían mucho según la causa y la gravedad de cada caso. Sin embargo, el tratamiento de la cistitis hemorrágica puede incluir:

  • Drenaje de la vejiga a través de un catéter (tubo) en una bolsa fuera del cuerpo;
  • si estás recibiendo un tratamiento de quimioterapia, los médicos pueden proponerte una quimioterapia alternativa o una dosis más baja;
  • Evacuación de coágulos mediante catéter o cistoscopia para eliminar los coágulos de la vejiga;
  • Irrigación continua de la vejiga, que inyecta líquidos en la vejiga para lavarla;
  • Líquidos intravenosos para aumentar la orina y enjuagar la vejiga;
  • tomar antibióticos para tratar las infecciones bacterianas o antivirales para combatir los virus.

Las personas con cistitis hemorrágica rara vez necesitan transfusiones de sangre para reponer las grandes pérdidas de sangre o la cirugía.

Lo importante es que, en cuanto notes la presencia de sangre en la orina, te pongas inmediatamente en contacto con tu médico. De este modo, la raíz del problema puede resolverse sin consecuencias desagradables.

Sin embargo, llegados a este punto, surge la pregunta: ¿cómo puede prevenirse la cistitis hemorrágica?

Algunas de estas reglas se aplican a todos los tipos de cistitis, independientemente de que sean hemorrágicas o no.

En primer lugar, hay que intentar beber mucha agua, al menos dos litros y medio al día. Si no estás acostumbrado, al principio puede resultarte difícil, pero verás que con el tiempo se convertirá en algo prácticamente automático.

Seguramente habrás oído que el zumo de arándanos es un excelente aliado para la prevención. Vamos a desmontar este mito: es una auténtica leyenda urbana, y en este artículo en profundidad te explico por qué. Como alternativa, te propongo Dimann Tisana, un complemento alimenticio a base de malva, cola de caballo y hierba de trigo.

Y ya que hablamos de hidratación, no podemos dejar de mencionar la dieta.

Una dieta sana y equilibrada, rica en fruta y verdura, es la base para prevenir la cistitis. Lo mejor es reducir el consumo de alimentos grasos y azucarados y evitar el consumo excesivo de alcohol.

Además, nunca debes retener el pis durante demasiado tiempo: si tienes ganas, no las pospongas.

Luego dedicamos unas líneas a la higiene íntima.

Es sumamente importante utilizar sólo limpiadores íntimos suaves que respeten el valor del pH, y lavarse a fondo después de cada relación sexual. La cistitis postcoital es un fenómeno que no debe subestimarse en absoluto y que puede contrarrestarse prestando atención a estas pequeñas medidas.

¡Así podrás experimentar el sexo de una forma más libre y despreocupada! 🙏🏻

Por último, prefiere la ropa interior de tejidos delicados y evita llevar pantalones demasiado ajustados.

Una cosa más: aunque no padezcas cistitis crónica, es bueno que te hagas revisiones periódicas, ya sea una visita al ginecólogo para revisar el suelo pélvico o un cultivo de orina.

Pero si tienes algún tipo de duda y quieres investigar las causas de tu cistitis, recuerda que estoy a tu disposición, puedes escribirme siempre que quieras.

Te abrazo,

Lorenza

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En este artículo hablamos de…

  • La cistitis hemorrágica es una inflamación aguda de la vejiga que combina los síntomas típicos de la cistitis con la presencia de sangre en la orina.
  • La cura y el tratamiento de este tipo de cistitis dependen en gran medida del grado de inflamación.
  • Unas sencillas medidas dietéticas y de higiene pueden ayudar a prevenir la cistitis, independientemente de su tipo.

¿Te hemos ayudado?